#Cuba Datos Actualizados de la Economía cubana demuestran que el Estado-Gobierno agotó sus capacidades de crecimiento vía Estatal | Academia.edu

Resumen Cuba requiere expandir su economía a tasas superiores a las que ha venido haciendo en el último decenio. Es la asignatura pendiente del proyecto revolucionario que supera medio siglo. En este propósito las inversiones juegan un rol esencial.

Origen: Articulo Proceso inversionista eficiente: PAPEL DEL ESTUDIO DE PRE INVERSIÓN EN LAS CONDICIONES DE CUBA | Inocencio Raúl Sánchez Machado – Academia.edu 

Puede apreciarse que el PIB ha presentado en el último decenio oscilaciones en su crecimiento anual  desde tasas máximas de un 12.1% (2006) hasta mínimas de un 1.3% (2014). Los años que cierran el período más reciente (20092014) destacan una tasa promedio anual del 2.4%, lo cual refleja un comportamiento que podría poner en riesgo las metas trazadas en los Lineamientos de la Política Económica y Social.

Una proyección “simulada” del crecimiento de la economía cubana, de no rectificarse las moderadas/bajas tasas que se han registrado en los últimos años, permitiría prever el comportamiento que se puede  apreciar en el Gráfico 2.


Gráfico 2. Simulación del PIB real (a precios constantes) para los próximos años (con cambios en la tasa promedio anual).
Fuente: Elaboración propia.

Mantener la tasa promedio de un 2.5% anual registrada en la dinámica del PIB entre los años 2009 y 2014, conduciría a aguardar hasta 2029 para lograr un PIB un 50% mayor; mientras que triplicar los niveles logrados en el pasado 2014 solo sería posible para 2059. Cambiar el dinamismo en tasas cercanas al 7% acortaría en diez y más de treinta (30) años la espera.!!!!

El proceso de ralentización económica antes esbozado tiene como uno de sus factores decisivos, las bajas tasas de acumulación, las cuales nunca en los años de referencia han superado el 16% del PIB del año (Gráfico 3); el promedio de este nivel de acumulación ha estado cercano al 13.2%.


Revista Cubana De Ciencias Económicas-EKOTEMAS- http://ekotemas.anec.cu
RNPS: 2429 • ISSN 2414-4681• Vol. 1 • No. 1 • enero-marzo • 2015 • pp. 1-11
Inocencio Raúl Sánchez Machado, Zulma María Ledesma Martínez

10 Alimentos que debes evitar para tener un vientre plano – YouTube

 

Mercado Laboral underground en Cuba ¿cuánto se paga por un empleo? 

Origen: Pagar por trabajar: ¿cuánto cuesta un empleo en Cuba? CubanetCubanet

LA HABANA, Cuba.- Armando, un joven de 30 años, está buscando trabajo en el sector estatal pero apenas ha logrado reunir la cantidad necesaria para obtener la plaza que busca. Ha ido a ver a un prestamista y hasta ha colocado en venta algunos adornos y muebles de su casa para llegar a los 600 dólares que le piden en la empresa Cubataxi por un empleo de chofer.

Si no paga esa cantidad, me dice el propio Armando, le dirán que todos los puestos de trabajo están ocupados, aunque él sabe que siempre existe al menos un par de lugares “fantasmas” en la nómina de la empresa, a la espera del mejor postor.

El mercado clandestino de empleos en las empresas estatales de la isla no es un fenómeno surgido en la coyuntura económica actual. Desde los años 80 se escucha hablar de personas que han debido pagar por ocupar un puesto de trabajo, sobre todo en el turismo, incluso por acceder a estudios de nivel medio o universitario.

La agudización de la crisis económica, la inestabilidad legal del sector privado y el constante acoso al cuentapropismo por parte del gobierno, entre otras causas, han favorecido el enraizamiento de este tipo de contrabando e incluso su penetración en espacios bajo el dominio directo de los militares, como han sido los casos de empresas como SASA, dedicadas a la comercialización de recambios para autos o Rent-a-car de Gaviota, de alquiler de vehículos para el turismo, donde las plazas pueden alcanzar valores entre los 5 mil y 10 mil dólares.

María Elena Verdecia fue trabajadora de uno de estos puestos de renta ubicado en el aeropuerto José Martí, de La Habana, y nos comenta sobre los mecanismos de contrabandeo laboral:

“(…) el total de las plazas han sido compradas o han sido ocupadas por personas que tienen algún tipo de relación familiar o de amistad con funcionarios de la empresa”, asegura Verdecia, y continúa: “El Rent-a-car del aeropuerto es uno de los más codiciados, esa plaza cuesta 5 mil dólares, porque se sabe que ese dinero se puede recuperar en un par de meses. (…) Pero después que pagas los 5 mil, todos los meses tienes que mantener contento a los jefes, al de Personal de la empresa, a los inspectores pero aun así es una plaza muy codiciada, aunque peligrosa, por eso me tuve que ir de allí, sabía que en cualquier momento podía caer presa. (…) En ningún Rent-a-car entra nadie a trabajar porque ha caído bien o porque ha tenido suerte, es un negocio donde está enredado todo el mundo”.

Por otra parte, Juan Carlos, responsable de ventas de un puesto de renta de autos para el turismo, afirma que en el año 2001 debió pagar unos 2 mil dólares por su empleo:

“Tuve que pedir prestado el dinero a una tía de mi esposa que vive en los Estados Unidos (…), después se lo pagué en tres meses. (…) Pero en el 2001 no había tanto turismo como ahora, por eso los que entran tienen que pagar 3 mil, 4 mil y hasta tengo amigos que han pagado 6 mil porque se sabe que se le saca ese dinero fácil en unos meses (…). Yo no tengo miedo porque esto lo sabe todo el mundo, las plazas en turismo casi todas se venden, pregúntale a cualquiera por ahí”, dice Juan Carlos.

No solo obtener un empleo en el turismo supone un acto de compra-venta o de soborno, también en el “naciente” sector cooperativo se han replicado estos fenómenos, como ha sido el caso de los taxis ruteros, donde el costo de la plaza de chofer oscila entre los 100 y los 500 dólares.

Manuel, chofer de un microbús perteneciente a una de las cooperativas de La Habana, pagó en febrero de 2016 unos 200 dólares por su puesto de trabajo:

“Fueron 200 pesos (dólares) y entré a trabajar ese mismo día. La primera vez que fui a pedir un trabajo, yo que soy chofer desde hace 20 años, me dijeron que no había plazas (…), fui a ver a un vecino que trabaja en los ruteros y él me dijo cómo había que entrarle a la cosa. (…) Como a los dos días fui con el tipo del que me hablaron y, como te digo, empecé a trabajar al momento. (…) Ahora sé de gente que ha pagado hasta 500 pesos, cuando son los microbuses, porque para los carros (autos de 4 plazas) nadie paga más de 100 pesos”, asegura Manuel.

Comprar un empleo es algo común para los cubanos, tanto es así que aquellas personas de bajos recursos y para los que resulta extremadamente difícil conseguir el auxilio de un prestamista, ni siquiera se acercan a las empresas estatales a solicitar empleo.

Aunque Javier Echemendía, de 53 años, ha trabajado en la Empresa de Ómnibus Urbanos de La Habana desde finales de los años 80, asegura que, a pesar de haberlo intentado, jamás ha podido contratarse como chofer en empresas como Transgaviota o Transtur.

“Dondequiera te piden dinero por una plaza, así a lo descarado te dicen que si no pagas no entras, ¿y a dónde uno puede ir a quejarse si siempre son familia de tal o más cual dirigente o todo está arreglado por ahí para arriba? (…) Yo he visto que han aceptado a chiquitos con menos experiencia que yo, que en treinta años jamás he tenido un accidente, y es porque pagan la plaza. (…) Incluso para entrar como segundo jinete (plaza compartida por dos choferes) en Cubataxi hay que pagar. Esto no es para gente pobre”, dice Javier.

Para complicar la situación, empresas como Cubataxi han creado la figura del chofer secundario o “segundo jinete”, que es un chofer subcontratado por el chofer principal que actúa como dueño del auto estatal, un experimento que emula el escenario, en fase de eliminación, de los llamados “boteros” del sector cuentapropista y que convierte al Estado en un beneficiario indirecto de la explotación laboral.

El segundo jinete, prácticamente sin derechos laborales elementales, debe pagar al primero una suma diaria acordada, además del pago inicial por ocupar el puesto.

Con respecto a esto, Marcos, un chofer subcontratado, nos explica:

“Es un taxi estatal pero el chofer lo usa como si fuera un almendrón. Supuestamente yo debería ser su ayudante o copiloto en viajes largos, o cubrirle las vacaciones, cosas así, pero en realidad él lo que hace es sentarse en su casa mientras yo manejo más de diez horas al día para poder pagarle el dinero. (…) Yo por esa plaza pagué 300 dólares, más tengo que darle 30 dólares diarios, pero yo con eso estoy reuniendo para conseguir una plaza de chofer principal o comprar un Cocotaxi que también da su dinero y con menos problemas”, afirma Marcos.

Entre los trabajos más codiciados y por los cuales es preciso pagar, a modo de soborno, sumas de dinero que doblan en decenas y hasta en un centenar de veces el salario anual promedio de los cubanos, se encuentran aquellos vinculados al turismo y al acarreo de mercancías entre almacenes y grandes empresas, también aquellas dedicadas a la importación y exportación de productos, en especial los alimentos y las piezas de recambios para autos, de modo que empleos como el de un valet parking en un hotel o jefe de almacén, incluso de ayudante de almacenero o estibador, en cualquier empresa estatal, por ejemplo, están valorados por encima de los mil dólares.

Asamblea Nacional desconoce por unanimidad la ANC

Origen: Asamblea Nacional desconoce por unanimidad la ANC

La Asamblea Nacional venezolana aprobó por unanimidad el proyecto de acuerdo en reafirmación de la vigencia de la Constitución y desconocimiento de todos los actos de asamblea nacional constituyente (ANC) que menoscaben los derechos humanos.

En sesión ordinaria, el Parlamento venezolano debatió un proyecto de acuerdo en el que ratifican la defensa de la Constitución y reafirman la ilegalidad de la instalación de la asamblea nacional constituyente impuesta por Nicolás Maduro.

En el acuerdo aprobado se estableció mantener el dominio jurídico de la sede del Palacio Federal Legislativo.

Calificaron la decisión de la ANC de destituir a la fiscal Luisa Ortega Díaz como nula e inexistente. Señalaron que  desconocen la designación de Tarek William Saab como nuevo “fiscal” e indicaron que representa una usurpación de poderes.

Los diputados ratificaron su respaldo a la fiscal mientras continua en el ejercicio de sus funciones.

Acordaron denunciar internacionalmente la violación de los derechos de la comisión de la verdad que pretende instalar la fraudulenta asamblea nacional constituyente. Dicha comisión fue calificada durante toda la sesión como un ente perseguidor de ciudadanos.

La Asamblea Nacional convocó una sesión ordinara para el miércoles 9 de agosto a las 9:00am para dar continuidad al tema discutido la tarde de hoy.

Por otra parte el presidente del Parlamento, Julio Borges, informó que el miércoles realizarán una segunda sesión en alguna localidad fuera de la capital; sin embargo, no confirmaron el lugar.

Ilegal es Ilegal y nadie te va a salvar!!! USA Deportaciones #US

Origen: Acorralados por Trump: la fe de una indocumentada para salvar el taller familiar sola y con un grillete en el tobillo – Univision 23 Miami – Univision

¿Cómo pudieron abrir un negocio siendo indocumentados y manejar cuentas bancarias?. Algo falla en el Sistema en USA!!

Maty Muy, una inmigrante guatemalteca, fue en marzo pasado a renovar un permiso de trabajo a una oficina de ICE y acabó viviendo una pesadilla: a ella le pusieron un grillete y a su esposo lo detuvieron. Ahora, cambia llantas en el taller familiar y lucha para que ambos puedan permanecer en EEUU, donde nació su hijo. Su caso es una muestra del drama que viven algunas familias con el cambio de prioridades de deportación.

  Con su marido detenido, esta indocumentada se ocupa del taller familiar con un grillete en el tobillo Univision

Todo sería perfecto si no fuera porque los Chávez-Muy nunca pudieron legalizar su situación migratoria y el pasado 8 de marzo lo que debía ser una cita rutinaria con Inmigración para renovar un permiso de trabajo se convirtió en una pesadilla que puso a temblar todo lo que han construido en las últimas décadas.

La mujer lamenta que los oficiales no tuvieran en cuenta sus permisos de trabajo que les otorgaron bajo el gobierno de Barack Obama, ni que su esposo lleve 24 años en el país y ella 15, ni que tengan un hijo estadounidense de 13 años. Pero principalmente le molesta el trato que asegura le dieron en la oficina: » A mí me dijeron que parecíamos pescados, que nosotros solos nos íbamos a entregar, mordíamos el anzuelo como los pescados. Que ellos no tenían necesidad de ir a buscarnos porque nosotros teníamos que ir a ese lugar por fuerza y ley para conseguir la firma que necesitábamos y allí era donde ellos nos agarraban», asegura.

Desde ese día, su esposo Victor está encerrado en el centro de detención de Broward, al norte de Miami, mientras que a ella le pusieron un grillete electrónico que monitorea todos sus movimientos. Los dos tienen órdenes de deportación antiguas que no fueron ejecutadas y ahora luchan para que no los devuelvan a su país.

Nuevas prioridades de deportación

El drama de esta familia se ha repetido en los últimos meses con la ampliación de las prioridades de deportación impuesto por la administración de Donald Trump, que incluye a quienes tenían órdenes de deportación emitidas hace años. Eso hace que familias establecidas en EEUU que van voluntariamente a reportarse con las autoridades acaben siendo detenidas y sujetas a su expulsión.

Desde el 8 de marzo, Víctor Chávez está en el centro de detención de Bro...
Desde el 8 de marzo, Víctor Chávez está en el centro de detención de Broward. Su esposa, Maty, y su hijo, Jimmy, lo van a visitar cada domingo a las 8 de la mañana. C.J. Karp

Maty asegura que ella y su esposo se preocuparon cuando les informaron que frenarían los paros de deportación. «Habían dicho también que las deportaciones las iban a hacer a delincuentes, a gente mala, gente con un récord criminal», afirma, pero «mi esposo está ahí y él no es un delincuente: él no tiene un récord criminal. El delito de él ha sido trabajar, venir a este país de pequeño y, muchas veces por la ignorancia, nosotros sufrimos porque no estamos informados, no sabemos», lamenta.

En el caso de Maty, tiene una orden de deportación que fue emitida en ausencia en 2006. Por su parte, Víctor Chávez suma dos: una orden de deportación final que fue emitida en ausencia por un juez de Ohio en 1996 y otra, de 2006, en la que, según ICE, usó «identificación falsa» bajo el nombre de Israel González.»Como aseguró el secretario (de seguridad nacional John) Kelly, ICE ya no va a hacer excepciones con las clases o categorías de extranjeros deportables en función a una potencial ejecución de la ley. Todos los que violen las normas de migración están sujetos a detención y, si se les encuentra una orden de deportación final, sacados de EEUU», dijo la agencia en un comunicado a Univision Noticias.

En el momento que la administración Trump quitó esas excepciones que había puesto Obama, las autoridades migratorias comienzan a aplicar órdenes de deportación que ya existían, explica el abogado Ezequiel Hernández. Por eso, los permisos de trabajo que otorgaron a familias como los Chávez-Muy no están siendo renovados.

Bajo la administración de Barack Obama, Víctor y Maty pudieron solicitaron el ‘stay of removal‘, un amparo para detener las órdenes de deportación, con el que pudieron conseguir permisos de trabajo y establecer su negocio.

La abogada de inmigración Jill Hansen, que forma parte de la dirección del centro comunitario El Sol de Júpiter, explica que en esos casos había unas guías muy específicas para solicitar la excepción. «Si habías estado más de cinco años en EEUU, si tenías hijos o familiares nacidos en EEUU y si no tenías registro criminal te podían interrumpir la orden de deportación», explica. En esos casos, «tenías que ir cada año y en el pasado funcionaba de forma bastante automática: miraban si no tenías ningún delito y firmaban y te decían: ‘Vuelve el año que viene'», le explica Hansen a Univision Noticias.

 

Al frente del negocio

Pero esta vez, la cita con ICE fue bien diferente y Maty salió de la oficina con un grillete electrónico y llorando desesperadamente. Su hijo, Jimmy, esperaba fuera del edificio: » Todo el camino cuando íbamos a registrarla por su grillete, mi mamá lloraba y lloraba«, recuerda el niño. «Después fuimos a la casa y mis tíos se quedaron un rato tratando de calmarla, pero dentro de todo eso yo me recordaba que mi papá me decía: ‘Portate bien. Cualquier cosa, hácele caso a tu mamá'».

En fotos: Con su marido detenido por ICE, esta inmigrante se ha puesto al frente del taller de llantas familiar

«Yo me dije: ‘Mi esposo no va a estar pero yo tengo que estar porque tengo que ir a abrir el taller, tengo que hacerme cuenta que él va a regresar. Yo tengo esa responsabilidad de sacar adelante a mi hijo primero y todo lo que se refiere al área económica. Y tengo que luchar», recuerda. Y, apelando a su firme fe cristiana, le pidió a Dios que no faltaran clientes en el negocio.

Desde ese día, esta mujer de 42 años que no supera los 5 pies de altura (1.5 metros) decidió remangarse la camisa y pasó de atender el teléfono y la oficina, gestionar los pedidos y limpiar el negocio a hacer todo lo necesario: subir carros con el gato, desmontar las llantas y reemplazarlas, negociar con los clientes… La ausencia de su marido también ha afectado en el aspecto económico a la familia. Como mecánico, Víctor hacía algunos trabajos adicionales en el taller que, independientemente de cómo fuera la venta de llantas, aseguraba beneficios al negocio. Eso ha hecho que, de los dos trabajadores contratados que tenían, Maty haya tenido que prescindir de uno. Pero en el taller nunca faltan las visitas de familiares y amigos que, conocedores de la situación, están dispuestos a echar una mano.

La lucha legal

Maty también cuenta siempre con el apoyo de Jimmy, que confiesa que desde el día que detuvieron a su padre entendió la responsabilidad que eso significaba para él: » Sentía mucho pesar de que mi papá no estuviera aquí y empecé a darme cuenta de que si él no está aquí tengo que yo hacer lo que él tiene que hacer. Tengo que ser yo el hombre de la casa, pero ha sido duro«, confiesa el niño. «Usted me puede mirar aquí pero estoy destrozado adentro».

Jimmy es un buen estudiante que destaca principalmente en las materias d...
Jimmy es un buen estudiante que destaca principalmente en las materias de ciencias. El próximo curso debe empezar octavo grado y sueña con ser ingeniero biomédico. En la imagen, ensaya con su violín en la oficina del taller de sus papás. C.J. Karp

Ahora que está de vacaciones del colegio, va cada día al taller a ayudar con las llamadas y la atención de los clientes. También acompaña a su mamá a la iglesia varias veces a la semana. Y ambos visitan cada domingo a su padre en el centro de detención de Broward, el mejor momento de la semana para el niño, aunque levantarse a las 6 de la mañana sea una especie de suplicio para alguien a quien le gusta dormir como él.

Jimmy también se ha puesto al frente de varias iniciativas para luchar contra la deportación de sus padres como una petición online que crearon para evitar la separación de su familia que no dudó en enviar personalmente a los senadores de Florida Bill Nelson y Marco Rubio y a otros representantes locales.

La petición ya supera las 1,200 firmas para solicitar a las autoridades que no deporten a los papás de Jimmy. «Vi que hasta los niños más malos de la escuela que siempre andan haciendo problemas pusieron que yo estudié con ellos y que es es algo que deberían hacer porque quieren que yo esté aquí», afirma.

Mientras tanto, el abogado de Víctor, Héctor Díaz, está tratando de reabrir el caso de migración más antiguo, la orden de deportación en ausencia que le puso un juez de Ohio en 1996, alegando que entonces era solo un adolescente de 16 años que no hablaba inglés ni español, solo maya quiché, y que nunca se enteró de su proceso de migración porque no recibió la notificación del gobierno de su cita en la corte.

De conseguirlo, tratará de transferir también la segunda orden de deportación al Centro Transicional de Broward, donde se encuentra detenido. Pero reconoce que es un caso difícil ya que Chávez nunca apeló las decisiones de esos jueces. Y, con una orden de deportación desde hace más de dos décadas, los 24 años que ha estado en el país no suman en su expediente. «Ni el trabajo, ni el negocio, ni su aporte en la comunidad cuentan en términos legales», explica el abogado.

Futuro incierto

Como muchos inmigrantes, cuando llegaron al país huyendo de la guerra y la falta de oportunidades económicas, Chávez y Muy no tuvieron asesoría legal y aseguran que, por falta de información y recursos, nunca entendieron sus casos con Inmigración hasta que hace unos años, con su vida establecida en Júpiter, fueron a consultar con abogados preocupados por el futuro de Jimmy.

Maty va a la iglesia tres ó cuatro veces a la semana.
Maty va a la iglesia tres ó cuatro veces a la semana. C.J. Karp

Así es como consiguieron sus permisos de trabajo. Con el negocio en marcha, los Chávez-Muy se convirtieron en una familia querida por la comunidad. «Víctor es un hombre de familia, involucrado en su comunidad», afirma Constance Holmes, con quien, hasta que fue detenido, Chávez dirigía un equipo de fútbol que ofrecía alternativas a los niños de bajos recursos de la comunidad. «No creo que él entre en el perfil de personas que nuestro presidente busca deportar», apunta.

Como ella, muchos de los clientes que llegan al taller de la familia se sorprenden al no ver a Víctor y saber que la pareja está en peligro de deportación. Y aunque la fe hace creer a la familia que todo va a salir bien, la posibilidad de regresar a Guatemala es algo que hablan abiertamente.

«Yo pienso que yo todavía no estoy preparada si a mí me dicen que a él lo van a deportar porque con el alma quisiera que los tres estuviéramos juntos e ir adelante con el pequeño negocio que tenemos», apunta Maty. Pero en su mente no cabe la idea de la separación, por lo que, afirma, si expulsan a uno del país, se irán todos. «Tendríamos que irnos todos para estar juntos y con mucho dolor para Jimmy que siempre dice que no quiere irse porque él quiere estudiar en la universidad de aquí», añade.

El pequeño, que está a punto de entrar en octavo grado, sueña con ser ingeniero biomédico y cree que tendrá mayores oportunidades si se queda en EEUU. «Nos gustaría que él se prepare para que no sufra lo que nosotros sufrimos, que el futuro de él sea mejor para ver un día a un hombre realizado».

¿Por qué no funciona el Capitalismo Militar Totalitario de Estado en Cuba?

Origen: ¿Por qué no funciona el capitalismo militar de Estado? | Diario de Cuba

Circula por Internet una divertida parodia de Despacito, la exitosa canción de Luis Fonsi, ridículamente bailada por Raúl Castro, su hijo Alejandro, coronel formado en Moscú en las escuelas de inteligencia del KGB, y el nieto y guardaespaldas del general-presidente, Raúl Guillermo, apodado «El Cangrejo».

Es la familia imperial cubana. Los tres, como toda la población, perciben que el país se hunde en la miseria, pero están paralizados por el terror a perder el poder. A estas alturas, Raúl Castro no tiene la menor duda de que el capitalismo militar de Estado no funciona, y sabe que sus reformas, los «lineamientos», han fracasado, pero insiste en marchar hacia el abismo «sin prisa, pero sin pausa».

El capitalismo militar de Estado es el modelo económico puesto en marcha por Fidel Castro desde los años 90, orgullosamente diferente al chino y al vietnamita. ¿Por qué no funciona?

Esencialmente, por dos razones vinculadas a la naturaleza humana: primero, porque no está basado en incentivos sino en el temor a los castigos. Si algo aprendimos con toda certeza del conductismo es que los refuerzos positivos tienden a reproducirse mientras los negativos producen el efecto contrario. En segundo lugar, el capitalismo militar de Estado prohíbe y reprime el ímpetu de los emprendedores, que es el principal motor del desarrollo y progreso de cualquier sociedad.

Grosso modo, el capitalismo militar de Estado se basa en la idea de que las principales fuentes de riqueza de Cuba están en las 2.500 empresas medianas y grandes del país, todas resguardadas en el ámbito estatal, preferentemente dirigidas por militares, mientras las actividades menores de servicio (restaurantes, pequeñas pensiones, payasos de fiestas particulares y un sinfín de minucias) le darían trabajo al grueso de una población cuidadosamente vigilada para que no acumule capital y así privarla de su potencial poderío político.

Objetivamente, estamos frente a un modelo de organización económica centralizado y planificado, sustentado en el mecanismo escolástico clásico: todas las verdades ya han sido descubiertas por los padres de la patria, y lo único que le queda a la sociedad es verificar constantemente la sabiduría de los próceres.

De esa estupidez se deriva otra: ya han sido formulados los 500 proyectos que aguardan en Cuba a los capitalistas extranjeros que quieran invertir y beneficiarse de la mano de obra dócil y barata que abunda en el país. Los economistas del régimen los han detallado minuciosamente. La planificación centralizada es eso: todo ha sido pensado y elaborado. No hay espacio para la improvisación y la creatividad. Tampoco para el mercado ni la competencia, esos inventos diabólicos del neoliberalismo.

No sé si Raúl Castro y sus consejeros han examinado el perfil de las naciones modernas exitosas, pero todas están sujetas al crecimiento mediante lo que Hayek llamaba el «orden espontáneo». La economía crece en ellas libremente, sujeta al mecanismo de tanteo y error, guiada por el impulso de los emprendedores con sus esfuerzos espasmódicos, en las que unas veces «ganan» y otras «pierden», porque si algo es seguro en un régimen de libertad económica, es que no existe la menor seguridad. Los consumidores son los que deciden y estos son impredecibles.

¿Y quiénes son esos emprendedores que asumen todos los riesgos? No se sabe con certeza. El economista Wilfredo Pareto, en otro contexto, lanzó la hipótesis del 80-20, y es probable que la proporción sea, más o menos, la que se presenta en todas las sociedades. El 20% persigue sueños, trabaja incansablemente, se esfuerza con denuedo, inventa, innova, fracasa y se vuelve a levantar, y tira hacia delante del 80% restante.

Es cierto que una reducida parte de ese 20% alcanza un éxito económico tremendo, pero perseguirlos en nombre de la igualdad, más que un crimen es una absurda injusticia. Si Jeff Bezos hoy es el hombre más rico del planeta porque ha revolucionado la venta directa por medio de Amazon, o si Amancio Ortega es el más poderoso de España debido a las tiendas Zara, es algo admirable que solo condenan unos descerebrados de esa izquierda reaccionaria y mercantilista que continúa sin entender cómo se crea, esparce o destruye la riqueza.

A Raúl Castro y a su familia no les debía ser tan difícil entender este fenómeno. A principios del siglo XX regresó a Cuba un gallego muy pobre y semianalfabeto que pocos años antes había ido a pelear a la Isla por cuenta de su derrotada España. Lo repatriaron, pero volvió. Tenía el fuego del emprendedor y advirtió que Cuba era una tierra de oportunidades.

Cuando murió, medio siglo más tarde, dejó una fortuna de unos siete millones de dólares (hoy serían 100), varias docenas de trabajadores, una finca azucarera grande en la que funcionaban un cine, una estafeta de correo y una escuela. Se llamaba Ángel Castro, era el padre de Fidel, Raúl y otra decena de hijos. Murió antes de que sus descendientes inventaran el nefasto capitalismo militar de Estado.

‘¿Delegado yo?’ | ¿Delegado Tú? Cuba 

Origen: ‘¿Delegado yo?’ | Diario de Cuba

«Barrios en transformación», así llama el Gobierno a las comunidades habaneras más pobres, habitadas mayoritariamente por población de raza negra y que son las más golpeadas por los bajos salarios, el deterioro del fondo habitacional y las infraestructuras, entre otros problemas, como reflejan las propias estadísticas oficiales.

«Barrios marginales» los llaman sus propios habitantes, quienes ante la pregunta de si estarían dispuestos a ser delegados del Poder Popular en su circunscripción para intentar cambiar las condiciones de la comunidad responden con escepticismo, aunque algunos se muestran dispuestos.

«¿Delegada yo? Qué va, eso es de politiquería, mijo», dice Hortensia, residente en la barriada El Moro.

«Para eso tienes que ser del Partido o de la Juventud y aquí hace falta gente común que viva como nosotros porque así los problemas no hay que planteárselos, reconocen cuáles son. Por eso yo digo que en estos suburbios nada cambiará nunca mientras la política esté de por medio».

En La Cuevita todo el mundo conoce a Julito Prado por dos condiciones: ser devoto de Changó y por «calentar con la verdad y sin pelos en la lengua» cualquier reunión en su barrio. Cuando se le pregunta si quisiera ser delegado de su circunscripción, responde que sí.

«Pero cuando todo eso deje de ser política», matiza de inmediato. «Porque el racismo, la marginación y las malas condiciones de nuestras casas no se resuelven con Lineamientos. La Timba, Indalla, La Jata, Miraflores, Cayo Hueso, El Canal, La Guarapeta, Lawton, Jesús María, Pogolotti, todos estos barrios y muchísimos otros llevan años en las mismas condiciones, desahuciados, y ninguno de esos delegados resuelven ni transforman nada».

Natividad Gómez también quisiera ser delegada de su circunscripción en Atarés, pero alega no estar «integrada» al Partido Comunista y otras organizaciones del Gobierno.

«Si yo fuese delegada, acabaría con el trapicheo de materiales de construcción para que la gente pudiese arreglar sus casas como Dios manda», sueña en voz alta. «También alegraría el barrio reparando sus calles, sus escuelas, sus parques y todo eso con menos reuniones y con menos pipas de sirope de refresco».

En opinión de Reynaldo Falcón, de la barriada Altahabana, la cuestión es para qué un cubano de a pie quiere ser delegado de su circunscripción. «La única vez que fui a votar fue hace más de 15 años, cuando en el barrio se postuló un amigo mío, Denis Frank», recuerda.

«Se presentó como independiente, pero no estaba afiliado a ninguna organización disidente. Logró llegar a delegado por encima de cinco miembros del Partido. Sin embargo, le hicieron la vida un yogurt y hasta lo acusaron de aprovecharse del cargo para beneficio propio. No duró ni un año como delegado».

Los más jóvenes

Las generaciones más jóvenes, esas que a criterio de la realizadora audiovisual Yaíma Pardo «fueron desterradas de toda la épica de la Revolución», también asumen al delegado de la circunscripción como una herramienta política, «como un policía más que te vigila».

«En estos barrios muchos jóvenes somos mal mirados por la simple razón de que no tenemos buenos estudios o porque no pertenecemos a las organizaciones de masas», apunta Raúl Daniel, de La Güinera, quien asegura manejar «los dos idiomas de la vida: el del barrio y el decente».

«Sé manejarme con todas las personas, por eso me cuentan sus problemas, lo reales, los que duelen, y porque de corazón y desde mis posibilidades intento ayudar aunque sea aconsejando. Eso no lo hace ningún delegado que yo haya conocido en mis 30 años, ni con su carné del Partido, ni con sus muelas sobre el imperialismo y el bloqueo. Yo no creo que hagan falta delegados, sino gente con deseos de cambiar las cosas de verdad».

En cambio, Yadiris Susana, joven de 25 años y vecina de El Canal, cree que los delegados son necesarios.

«Pero tiene que ser un tipo que de verdad represente los problemas del barrio y no que solo lo veas en las reuniones del Comité (de Defensa de la Revolución), cacareando las necesidades de la Revolución o culpando a la gente por las montañas de basura, los robos o los incumplimientos con las tareas ‘cederistas’. Como delegada me importaría que las mujeres jóvenes tuviesen círculo infantil para sus hijos, y acabar con la violencia que tenemos dentro por vivir apiñados».

«Yo quisiera ser delegado para que el pasado no nos persiga como el jefe de sector» de la Policía, dice Rubencito, del reparto Juanelo.

«Uno se portó mal en el pasado, pero también la gente cambia. Muchos jóvenes en estos barrios nos convertimos en promotores naturales de la comunidad haciendo acciones culturales y la propia gente nos agradece y hasta nos admira por eso. Somos más populares que cualquier delegado, porque saneamos el barrio sin que nadie nos mande ni porque queramos cumplir con el Comité ni con nadie», añade.

«Lo hacemos por el barrio. ¿Un delegado puede hacer eso?».

Cuba. La disidencia socialista alza su voz (Democracia contra Stalinismo, el escenario cubano)

Origen: La disidencia socialista se rebela contra los extremistas

Cuba. La disidencia socialista alza su voz (democracia contra stalinismo, el escenario cubano)

 Miami | Agosto 02, 2017
El bloguero Iroel Sánchez (izquierda) es una de las figuras más visibles de los extremistas que acusan a la disidencia socialista de "estar trabajando para el imperialismo y la restauración capitalista". (Captura)
El bloguero Iroel Sánchez (izquierda) es una de las figuras más visibles de los extremistas que acusan a la disidencia socialista de «estar trabajando para el imperialismo y la restauración capitalista». (Captura)

Los ataques del extremismo dogmático encabezado por Iroel Sánchez y Enrique Ubieta contra un grupo de instituciones e intelectuales del oficialismo o cercano a él que lindan con la disidencia socialista han provocado una especie de rebelión en la granja.

Nadie puede aceptar que lo acusen de supuesto «centrista que en realidad estaría trabajando para el imperialismo y la restauración capitalista». Callarse hubiera sido aceptar. Los acostumbrados a denigrar y descalificar a la oposición indefensa cometieron el grave error de subestimar la capacidad de respuesta que ha mostrado este sector de la intelectualidad cubana que históricamente ha apoyado el «socialismo», pero con matices críticos.

Las víctimas incluyen a la prestigiosa Revista Temas, Cuba Posible, Cartas desde Cuba, OnCuba, La Joven Cuba, Periodismo de Barrio, El Estornudo, entre otros. Y entre los intelectuales que se han sentido aludidos directa o indirectamente y han salido a defenderse están Silvio Rodríguez, Aurelio Alonso, Carlos Alzugaray, Julio Carranza, Víctor Casaus, Vicente Feliú, Pedro Monreal, Arturo López Levy, Francisco Rodríguez, Félix Sautié, Jorge Gómez Barata, Israel Rojas, Humberto Pérez, Julio César Guanche, Jesús Arboleya, y el periodista uruguayo-cubano Fernando Ravsberg, entre otros. Hay muchos más que no han respondido, pero igualmente deben sentirse aludidos.

Todos saben que detrás de los burdos ataques está la mano del Departamento Ideológico del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y del aparato de contrainteligencia ideológica de la Seguridad del Estado, lo cual es muy fácil de identificar porque «casualmente» las diatribas salen en Granma, Cubadebate y la blogosfera auspiciada desde el oficialismo dogmático.

Silvio Rodríguez expone en su blog Segunda Cita que esto se relaciona con la idea sobre la pertinencia o no de buenas relaciones con EE UU. En buena medida tiene razón.

Los partidarios de mantener pleno distanciamiento de EE UU, en el fondo desearían que continuara el bloqueo-embargo en la forma más feroz posible y que siga la tensión permanente con el vecino del Norte para tratar de continuar justificando la máxima centralización y estatalización del poder económico sin importar las consecuencias y evitando cualquier avance en la democratización defendida por los «centristas».

Se trata de un diverso pensamiento de izquierda, nacionalista, proveniente del mismo seno «revolucionario», pero de tendencia democrática, plural en lo político y lo económico, antidictatorial; siempre presente pero ninguneado, maniatado y acallado por el aparato burocrático, que ha logrado sobrevivir a base de malabares y equilibrios que le han impedido, hasta ahora, convertirse en una alternativa al estatalismo.

Durante el IV Congreso del PCC en 1990-91, coincidiendo con la debacle de la URSS y el «campo socialista», florecían en Cuba las ideas cercanas a la perestroika y la glásnost de Gorbachov. Desde la contrainteligencia militar se desató el Plan Alejandro, una gigantesca caza «secreta» de «perestroikos» dentro de las FAR, el MININT, el PCC y el MINREX, utilizando como pretexto las Causas No.1 y No.2 de 1989 contra los Generales Ochoa y Abrantes.

Miles de funcionarios de nivel alto y medio fueron enviados a «cumplir otras misiones», jubilados o simplemente cesanteados. En ese mismo marco, pocos años después fue desactivado el Centro de Estudios de América (CEA), un centro de investigación de Ciencias Sociales adjunto al Departamento América del CC donde un grupo de estudiosos empezaron a abordar la realidad cubana desde una perspectiva diferente a la fidelista.

Haroldo Dillas, uno de los miembros del Consejo de Dirección del CEA, hoy exiliado escribía en un artículo en 2011: «El día 27 de marzo de 1996, sin previo aviso, Raúl Castro, en su rol habitual de dóberman del sistema, leyó por televisión un informe del V Pleno del CC del PCC en que se calificaba al CEA de quinta columna del imperialismo al servicio de la CIA».

La acusación a los actuales «centristas» es del mismo tipo.

La diferencia con aquellos años la marcan la desaparición física del icono principal -inspirador del centralismo y el autoritarismo que aplastaba con su sola presencia cualquier simple disidencia- y el crecimiento del acceso a internet que ha posibilitado la extensión de este pensamiento y su penetración en todos los estratos de la sociedad cubana, a tal punto que podría afirmarse que va predominando en las capas medias y bajas, en el propio seno de la intelectualidad tradicionalmente oficialista.

Ahora, en Cuba, crece el sentimiento de que son imprescindibles verdaderos cambios democráticos, y sus promotores no se encuentran en la Asamblea Nacional o en el aparato burocrático machadista del PCC, pero pululan en los centros de investigación oficiales, en las universidades y en los propios aparatos del Estado donde el pensamiento de los intelectuales juega un papel fundamental, y en la oposición, desde luego. El espíritu de la renovación no lo han podido matar.

Ya no puede ocultarse el desastre del modelo estatal asalariado de matriz estalinista y no hay manera de justificar su continuidad, al tiempo que la pantalla del estatal-socialismo perdió todo su espejismo y la oposición en general va creciendo en todos los sectores.

Para que este amplio pensamiento democrático, que incluye socialistas, pueda convertirse en una eventual alternativa al estatalismo, deberá establecer con toda claridad sus diferencias con el mismo, poner la lucha por la democracia en primer plano y reevaluar sus posiciones sobre la oposición pacífica tradicional.

#VENEZUELA, ¡¡CONFIRMAN!! FUERON MANIPULADOS, LOS RESULTADOS CONSTITUYENTE YouTube

EL MEGA FRAUDE CONSTITUYENTE ES UNA REALIDAD, NI LOS PROPIOS CHAVISTAS SE LO CREEN EN VENEZUELA Y SE RIEN, SE BURLAN Y HACEN MEMES.  CHAVEZ APARECIÓ DICIENDO: «8 MILLONES!!! TIBISAY TE PASASTE!! NI YO EN LOS MEJORES MOMENTOS, QUE BOLAS.!!!

 

 

Maduro, el chofer que se resiste a perder el control del autobús

Origen: Maduro, el chofer que se resiste a perder el control del autobús

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Maduro, de 54 años, es el heredero político del fallecido Hugo Chávez, quien lo ungió tres meses antes de su muerte -el 5 de marzo de 2013- para que liderara la «revolución bolivariana»
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El presidente Nicolás Maduro, quien logró este domingo sacar adelante la elección de una controvertida Asamblea Constituyente, es un exconductor de autobús y protagonista de una de las mayores crisis de Venezuela.

«Es la votación más grande que haya sacado la revolución bolivariana en toda la historia electoral en 18 años», celebró Maduro, después de que el poder electoral anunciase que sufragaron más de ocho millones de ciudadanos, el 41,5% del padrón electoral, en una contienda a la que no acudió la oposición por considerarla «fraudulenta».

De 54 años, es el heredero político del fallecido Hugo Chávez, quien lo ungió tres meses antes de su muerte -el 5 de marzo de 2013- para que liderara la «revolución bolivariana».

Sin el carisma de su mentor, intenta imitarlo con apariciones diarias en televisión, un vocabulario popular y discursos cargados de retórica antiestadounidense y denuncias de golpe de Estado.

Pero también ha ido construyendo un estilo propio. Maneja su camioneta y tiene cuentas prácticamente en todas las redes sociales.

En plena ofensiva opositora para sacarlo del poder mediante un referendo revocatorio que fue cancelado, lanzó en 2016 «La hora de la salsa», un programa radial en el que hacía gala de bailarín. En las tarimas suele bailar con su esposa, Cilia Flores, a quien llama «primera combatiente», y toca la tambora.

Todo ello enfurece a sus oponentes, que le llaman «dictador» y le reprochan que se divierta cuando el país vive un colapso económico y protestas que dejan unos 125 muertos en los últimos cuatro meses. «Amargados», les responde Maduro, elegido hasta 2019 y quien suele poner motes a sus principales adversarios como «cejotas», «capriloca» y «pichón de Hitler».

– A contracorriente –

Maduro gobierna desde el primer día en convulsión, pues un sector opositor impugnó su triunfo por estrecho margen sobre Henrique Capriles, quien lo llama «vago» y le critica que engorde mientras otros venezolanos sufren la escasez de alimentos o buscan comida en la basura.

Con poco más de un año en el Gobierno, los precios del petróleo cayeron un 50%, una calamidad para un país históricamente dependiente del crudo. Su popularidad se derrumbó hasta el 21,8%, según Datanálisis, lejos de la alta aprobación de un Chávez que se zambulló en petrodólares.

El gobernante atribuye la crisis a una «guerra económica de la derecha» apoyada por EEUU para derrocarlo, y se justifica en que la oposición no le ha dado un solo día de tregua. En 2014, enfrentó una primera ola de manifestaciones liderada por el opositor Leopoldo López, que dejó 43 fallecidos.

– Sin el liderazgo de Chávez –

«Será madurista, pero chavista no es», comentó a la AFP la exministra Ana Elisa Osorio, resumiendo el sentimiento de un sector de la izquierda que ve cómo la revolución se desmorona.

Osorio y otros exministros chavistas como Héctor Navarro consideran que Maduro se pasó de la raya con la Constituyente, al no someter a referendo su convocatoria y elegirla con reglas «amañadas» para eliminar contrapesos.

Pero el mandatario afirma que es el mayor defensor del legado de Chávez, quien lo definió como «un revolucionario a carta cabal», y que su intención es mejorar la Carta Magna que promulgó su padre político en 1999.

También reivindica que hace de «tripas corazón» para mantener los programas sociales que catapultaron al chavismo, una fuerza que desde el origen estuvo ligada al ingreso petrolero y acusada de una profunda corrupción.

Vivió el mayor revés oficialista con la pérdida del Parlamento en 2015 a manos de la oposición, pero maniobró con el apoyo de los militares y los poderes judicial y electoral.

– Rockero y católico –

Nacido en Caracas, se declara católico y en su adolescencia fue guitarrista de una banda de rock llamada «Enigma». Está casado con Cilia Flores, poderosa dirigente y ahora constituyente. La oposición asegura que nació en Colombia, pero él lo niega.

De 1,90 metros de estatura y poblado bigote negro, es padre de «Nicolasito», también aspirante a asambleísta fruto de un matrimonio anterior a Flores. «Es un buen político, pero no un estadista», opina Nicmer Evans, politólogo chavista crítico del actual Gobierno.

Exsindicalista del Metro de Caracas, recibió formación comunista en Cuba en los años 80 y con frecuencia viaja a la isla. Antes de ser canciller, presidió el Parlamento (2005-2006), aunque su actividad legislativa arrancó en 1999, elegido por un movimiento que fundó Chávez.

Sus destinos se habían cruzado en el Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 (MBR-200), con el que Chávez lideró un fallido golpe de Estado en 1992 contra el entonces presidente Carlos Andrés Pérez.

Los chavistas disidentes, como la fiscal general Luis Ortega, han mostrado preocupación por lo que consideran derivas autoritarias de Maduro para mantenerse en el poder. «Maduro se ha convertido en el dueño y señor que decide qué se hace y qué no», comentó Osorio.